En la madrugada del 19 de agosto, un velero de lujo de 160 pies se hundió frente a la costa de Sicilia, Italia, tras ser golpeado por un tornado, dejando un saldo de un muerto y siete personas desaparecidas.

Se dice que entre las personas desaparecidas hay dos estadounidenses, cuatro británicos, un canadience y el siciliano Luca Cari, empresario y vocero del servicio italiano de bomberos y rescates.

En el yate viajaban 22 personas y hasta el momento, sólo se han logrado rescatar a 15 personas, entre ellos un niño de un año, sus padres y el capitán del barco, quienes fueron hospitalizados junto con otras cuatro personas.

Las autoridades italianas están usando helicópteros, botes, buzos y perros para buscar a los desaparecidos, pero hasta el momento no se ha localizado a ninguno de ellos, pero se tiene la esperanza de encontrarlos vivos a pesar de las adversidades.