Los hechos ocurrieron en la aldea de Majdal Shams en Los Altos de Golan, Israel, en donde decenas de personas se encontraban en un partido de fútbol cuando de nada más de 100 misiles cayeron al suelo.
Uno en particular, cayó sobre el campo de fútbol, dejando al menos 15 muertos y más de 30 heridos, los cuáles quedaron tirados desparramados por todo el campo por la fuerza del impacto de los misiles.
Se dice que tanto los heridos como los muertos tenían edades que oscilaban entre los 10 y los 20 años y que la mayoría de ellos eran personas que se encontraban jugando en el campo de fútbol.
Por ahora se desconoce el estado de salud de las personas heridas o si es que el número de muertos aumentó debido a que las heridas que sufrieron los asistentes fueron demasiado graves.