El presidente Joe Biden advirtió el domingo sobre los riesgos de la violencia política en Estados Unidos tras el aparente intento de asesinato contra el exmandatario Donald Trump el día anterior, e hizo énfasis en que «es momento de enfriar las cosas».
En un discurso en cadena nacional desde el Despacho Oval a la hora de mayor audiencia, Biden dijo que las pasiones políticas pueden estar elevadas, pero «nunca debemos caer en la violencia». El presidente reconoció las pasiones que hay en un año electoral, y que él y los republicanos ofrecen visiones políticas distintas, pero les suplicó a los estadounidenses hacer un «nuevo compromiso» para resolver sus diferencias de forma pacífica.
«No hay lugar en Estados Unidos para este tipo de violencia, para cualquier tipo de violencia. Nunca. Punto. Sin excepciones. No podemos permitir que se normalice este tipo de violencia», declaró el mandatario.
Biden habló durante seis minutos en lo que fue su tercer discurso a la nación desde el atentado del sábado, en el que un hombre armado mató a un espectador y causó heridas graves a otros dos. Hizo su advertencia horas después de que el subdirector del FBI, Paul Abbate, dijo que sus agentes han visto mensajes cada vez más violentos en internet desde el incidente del día previo en el mitin de Trump.
Por su parte, el expresidente y virtual candidato republicano hizo un llamado el domingo a la unidad y la resiliencia un día después de que un aparente atentado contra su vida le inyectó nueva incertidumbre a lo que ya era una tumultuosa campaña presidencial.
Trump dijo que la parte superior de su oreja derecha fue perforada por una bala. Sus colaboradores señalaron que está de «excelente ánimo» y en buen estado de salud. Llegó el domingo por la noche a Milwaukee para la convención, que comienza el lunes. Declaró al diario Washington Examiner que había reescrito su discurso para enfocarse más en la unidad nacional que en las políticas de Biden.
En una publicación el domingo en su red social, Trump dijo: «En este momento, es más importante que nunca estar unidos, y demostrar nuestro verdadero carácter como estadounidenses, permaneciendo fuertes y decididos, y no permitir que el mal gane».
En un discurso en cadena nacional en el horario de mayor audiencia el domingo, Biden exhortó al público a comprometerse nuevamente al debate civilizado. «No hay lugar en Estados Unidos para este tipo de violencia, para ningún tipo de violencia. Nunca. Punto. Sin excepciones», puntualizó. «No podemos permitir que esta violencia se normalice».
El FBI indicó que el agresor era Thomas Matthew Crooks, de 20 años y residente de Bethel Park, Pensilvania, una localidad ubicada a unos 80 kilómetros del lugar del tiroteo.
El agresor estaba armado con el fusil tipo AR de su padre y se encontraba encaramado en una azotea cercana cuando algunos asistentes al evento le informaron a la policía local de su presencia.