Para atender el creciente fenómeno migratorio, México y Estados Unidos acordaron crear un equipo de trabajo conjunto, al que se pueden sumar países expulsores de migrantes.

La reunión supone una presión parte de la administración del presidente Joe Biden a México tras el constante flujo migratorio en la frontera común y la salida de la caravana migrante desde Tapachula, Chiapas.

Así lo informó la secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena Ibarra, al término de una reunión entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y una delegación de alto nivel, encabezada por el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.

«Lo que sí vamos a hacer es un equipo de trabajo conjunto para reunirnos periódicamente, vamos a tener reuniones periódicas, a trabajar en conjunto con Guatemala, con los países de Sudamérica y Centroamérica, eso fue lo que realmente se habló y de cómo vamos a apoyarnos mutuamente», dijo la Canciller.

La encargada de la diplomacia mexicana destacó que fue una excelente reunión donde ambas naciones reafirmaron sus compromisos de amistad y trabajo conjunto.

«Algo muy importante es que ellos vinieron aceptando una invitación del presidente López Obrador, realmente respondieron en unas fechas que son complejas. Sin embargo, vinieron tres secretarios de Estado con su equipo».

Bárcena dijo que durante el encuentro en Palacio Nacional abordaron la importancia de la relación económica de ambos países, pero sobre todo de reabrir los cruces fronterizos, que es una prioridad para el gobierno mexicano.