El grupo islamista Hamás advirtió este martes de que no negociará la liberación de rehenes mientras siga la ofensiva militar de Israel en la Franja de Gaza.
«Afirmamos nuestra posición de rechazar categóricamente el mantener cualquier forma de negociaciones sobre el intercambio de prisioneros mientras continúe la guerra genocida de Israel», subrayó en un comunicado.
«Sin embargo, estamos abiertos a cualquier iniciativa que contribuya a acabar la agresión a nuestra gente y a abrir los cruces para traer ayuda y aliviar a los palestinos», añadió en referencia a la entrada de ayuda a través de los pasos fronterizos de la Franja.
Este martes el presidente de Israel, Isaac Herzog, dijo que su país «está preparado» para otra tregua que permita liberar rehenes y la entrada de ayuda humanitaria adicional en el enclave palestino, aunque puntualizó que toda la responsabilidad está en manos de Hamás.
Estas declaraciones se producen mientras aumentan las informaciones sobre posibles negociaciones para nueva tregua y llegan el día después de que el grupo islamista difundiera un vídeo con tres rehenes, uno de los cuales se pregunta si se han olvidado de ellos.
Antes de la tregua del pasado noviembre para intercambiar rehenes por presos palestinos en Israel, Hamás había difundido vídeos similares como medida de presión.
El jefe del Servicio de Inteligencia Exterior de Israel, el Mosad, David Barnea, se reunió el lunes en Varsovia con el director de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA), Bill Burns; y el primer ministro de Catar, Sheikh Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, en el ánimo de negociar una nueva tregua, según medios israelíes.
De las más de 240 personas que Hamás secuestró en suelo israelí durante su ataque del 7 de octubre, todavía quedan 129 rehenes en Gaza, de los que alrededor de una veintena se cree que están muertos.
La tregua del pasado 24 de noviembre, con la medicación de países como Catar, Egipto y Estados Unidos, permitió durante una semana la liberación de 105 rehenes, 24 de ellos extranjeros, a cambio de la excarcelación de 240 presos palestinos.
Tras el ataque de Hamás el pasado 7 de septiembre con más de mil 200 muertos y esos más de 240 secuestrados, Israel declaró el estado de guerra y lanzó una ofensiva militar por tierra, mar y aire sobre el enclave palestino, con más de 19 mil 600 muertos y más de 52 mil 500 heridos según el Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por el grupo islamista.