Una tormenta invernal azotó el noreste de Estados Unidos, dejando a su paso carreteras resbaladizas y miles de personas sin electricidad. En algunas áreas de Nueva Inglaterra, se registraron más de 15 centímetros de nieve, lo que provocó numerosos problemas en la región.
Uno de los incidentes más significativos ocurrió en Vermont, donde un camión de propano se incendió después de un accidente en una carretera resbaladiza. Las autoridades ordenaron evacuaciones en dos comunidades, incluyendo escuelas, para garantizar la seguridad de los residentes. Afortunadamente, la situación no empeoró gracias a una rápida acción de cuadrillas de emergencia y a una perforación en el tanque de propano, lo que redujo el riesgo de una explosión catastrófica.
Además, más de 25,000 hogares y negocios en Maine y más de 11,000 en Vermont quedaron sin electricidad debido a la caída de árboles y ramas cargadas de nieve sobre los cables eléctricos. Las temperaturas cercanas al punto de congelación empeoraron la situación en el norte de Nueva Inglaterra.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió la primera advertencia de tormenta invernal de la temporada para Nueva Hampshire y el oeste de Maine. El extremo norte de Vermont también estuvo bajo advertencia, al igual que el extremo norte de Maine, que ya había experimentado fuertes nevadas antes del Día de Acción de Gracias.
Esperan más nieve
Se esperaba que Vermont acumulara cerca de 20 centímetros de nieve, mientras que algunas zonas montañosas del oeste de Maine y Nueva Hampshire recibieron más de un pie de nieve.
Estas intensas nevadas causaron numerosos problemas de transporte en la región, con retrasos y suspensión de clases en varias comunidades del norte de Nueva Inglaterra.
En resumen, las fuertes nevadas en el noreste de Estados Unidos han dejado carreteras resbaladizas, cortes de electricidad y problemas en el transporte. Las autoridades están trabajando para garantizar la seguridad de los residentes y restablecer los servicios afectados.