La capital rusa vive desde ayer, la mayor nevada que se ha presentado en 145 años, pues en 12 horas ha dejado un manto de hasta 40 centímetros de nieve en algunos barrios.
Por su parte, Siberia se prepara para afrontar temperaturas de hasta -50°C, pues es uno de los años más fríos.
«Se ha batido el récord de precipitaciones en 145 años para un 3 de diciembre», informó el meteorólogo Román Vilfand, citado por TASS.
Debido a la nevada que continuó durante toda la noche, al menos 60 vuelos tuvieron que ser cancelados o pospuestos.
Por su parte, los servicios informaron que tendrán que trabajar las 24 horas para mitigar las consecuencias de la nevada récord.