La firma especializada en el sector asegurador Gallagher Re estimó que las pérdidas aseguradas por el huracán «Otis» alcanzarán los 10 mil millones de dólares y se convertirá en uno de los eventos más costosos, que si no el más alto, jamás registrado para el mercado asegurador mexicano.
«Otis exhibió un período prolongado de intensificación explosiva a medida que pasó de tormenta tropical a huracán de categoría 5 en menos de 24 horas. Una vez que llegó a tierra, Otis trajo ráfagas de viento huracanados, lluvias torrenciales y marejadas ciclónicas potencialmente mortales a la costa suroeste de México», explicó la firma.
En su estudio, detalló que el impacto calculado incluye daños directos y presunta interrupción del negocio con pérdida neta como resultado de impactos en las propiedades físicas, la infraestructura y la agricultura.
Gallagher Re dijo que se espera que «Otis» sea una de las catástrofes naturales más costosas en la historia de México y agregó que un evento de esta magnitud generalmente requiere un período de evaluación y procesamiento de reclamos de seguro más largo de lo normal.
Así, la intensidad de «Otis», al tocar tierra, desencadenará un pago del bono de catástrofe activo de México que fue emitido originalmente por el FONDEN (Fondo de Desastres Naturales) del Banco Mundial en 2020.
Gallagher Re dijo que la colocación de bonos cat tiene cobertura dividida en cuatro clases separadas: terremotos de baja frecuencia, terremotos de alta frecuencia, huracanes del Océano Atlántico y huracanes del Océano Pacífico.
«Los cuatro pagos potenciales oscilan entre 60 y 125 millones de dólares, y cada uno tiene activadores paramétricos que deben cumplirse para iniciarse. El importe total del bono es de 485 millones de dólares.
«Sin embargo, el FONDEN fue eliminado en septiembre de 2021 y ya no está ligado al bono cat. Esto significa que se espera que los pagos se dirijan directamente a los residentes afectados. Tal cambio significa que algunos municipios y estados no podrán recibir fondos para completar la reconstrucción de la infraestructura pública dañada», dijo.