México se posicionó este 2023 como el tercer país con mayor innovación en América Latina, manteniendo el lugar 58 a nivel global por segundo año consecutivo, reveló el más reciente Índice Mundial de Innovación.
Este es el segundo año en que México obtiene la misma puntuación y se encuentra entre los 60 países a nivel mundial, tras caer del puesto 55 en la edición 2021 del Índice, un nivel no visto desde 2017.
En la región latinoamericana solo Brasil y Chile, ubicados en los lugares 49 y 52 a nivel global están por encima de México.
En tanto, el estudio menciona que en Latinoamérica solo Uruguay y El Salvador son las únicas naciones que lograron mejorar su posición en la región, ocupando los lugares 63 y 95, respectivamente.
De acuerdo con Daren Tang, director general del índice de Innovación Global de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI, en inglés), el gasto corporativo en investigación y desarrollo (I+D) superó el billón de dólares por vez primera el año pasado, siendo las empresas de tecnología de la información (Tics) las principales impulsoras.
Por otro lado, sostuvo que el crecimiento anémico y la alta inflación, sumados a los efectos persistentes de la pandemia por la covid-19, están obstaculizando la innovación global.
También consideró que la financiación de la innovación va en decadencia desde 2021, cuando las economías empezaron a recuperarse tras los cierres económicos y confinamientos a los que obligó la contingencia sanitaria de la covid-19 y añadió que el valor de las inversiones de capital de riesgo disminuyó un 40 %.
Señaló que el desafío de la innovación global “es convertir el potencial de las nuevas olas de innovación en beneficios tangibles que lleguen a todos, en todas partes”.
“La adopción de tecnología podría estar aumentando (más personas que nunca tienen acceso a Internet, servicios sanitarios seguros y conducen vehículos eléctricos) pero la adopción aún no es lo suficientemente rápida”, expuso Tang en el reporte.
De acuerdo con el Índice Mundial de Innovación, las principales fortalezas de México se centran en cuatro rubros: infraestructura, sofisticación de mercado, instituciones y capital humano e investigación.
Al interior de infraestructura, destaca el mayor acceso y uso de las TIC’s, así como mayor participación electrónica y servicios en línea por parte del Gobierno mexicano; así como el desempeño logístico y ambiental.
En la sofisticación de mercado, se subrayó al acceso a crédito, mayor inversión y la diversificación de sus industrias y mercados.
Dentro de sus instituciones enfatizó la estabilidad operativa de las empresas, la calidad regulatoria y el entorno empresarial con énfasis en las políticas y cultura de emprendimiento.
Respecto de su capital humano e investigación sobresale la I+D especialmente por los inversores corporativos globales y el lugar que ocupan sus instituciones universitarias, que se ubican entre las 100 mejores.
En contraste, el Índice encontró áreas de oportunidad en productos de conocimiento y tecnología, con poco crecimiento productivo laboral, difusión del conocimiento; así como en la sofisticación de negocios, por poco pago por propiedad intelectual y gasto bajo en fabricación de alta tecnología y gasto en herramientas tecnológicas como software, entre otros.