El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) inició la primera etapa de la Nacionalización de los Servicios Integrales de los Tres Niveles de Atención con una inversión de 11 mil 221 millones de pesos.

Con la adquisición de equipo se podrá recuperar el control de los servicios especializados de anestesia, hemodiálisis, hemodinamia, mínima invasión, endoscopia y tamiz neonatal, que actualmente son servicios prestados por particulares, es decir, subrogados.

“La conclusión de los contratos con particulares traerá consigo importantes ahorros de recursos para la Institución, los cuales podrán ser destinados, en su momento, a continuar con su fortalecimiento, tanto de infraestructura como en la prestación de los servicios médicos”, expone el ISSSTE en el proyecto de renovación, encabezado por la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez.

El monto destinado equivale a las inversiones estimadas por nearshoring previstas para México en 2023.

Con los servicios especializados ya a cargo del propio ISSSTE se podrá garantizar que la población derechohabiente reciba un servicio de manera óptima, estima el Instituto.

«Además de las ventajas económicas para el Instituto, que representaría una erogación más eficiente de los recursos públicos y el fortalecimiento de su infraestructura, permitirá asumir la autonomía y responsabilidad en la prestación de los servicios (nacionalización)», se expone en el programa de adquisición de equipamiento en poder de El Heraldo de México.

A partir de este mes y en lo que resta del año se van a invertir siete mil 855 millones de pesos, y en el 2024 se destinarán tres mil 366 millones.

Se van a adquirir cinco mil 855 equipos médicos fortalecerá a 142 Unidades Médicas. El ISSSTE obtendrá un ahorro de dos mil 16 millones de pesos, considerando la diferencia entre la contratación y la adquisición de equipo médico.

“El costo de tercerizar los servicios ha generado una importante erogación de recursos al ISSSTE, los cuales se han incrementado de manera gradual en cada ejercicio, mismos que son considerados como ventajosos para los proveedores, dadas las amplias ganancias económicas que han obtenido en detrimento de las finanzas públicas”, indica.