Una encuesta del gobierno federal de Estados Unidos reveló que casi el 80% de la controvertida barrera flotante erigida por funcionarios de Texas en medio del Río Bravo para impedir el cruce de migrantes se encuentra técnicamente en el lado mexicano de la frontera entre Estados Unidos y México.
De acuerdo con la información que se presentó en una audiencia judicial federal en que la administración Biden demanda la remoción de la barrera establecida por Texas en julio, como parte de una iniciativa encabezada por el gobernador Greg Abbott para rechazar a los migrantes y cuestionar las políticas fronterizas del presidente Biden.
El gobernador Greg Abbott y otros funcionarios de Texas han defendido la necesidad de la barrera para evitar el cruce ilegal de migrantes hacia Estados Unidos. Sin embargo, la encuesta conjunta realizada por funcionarios estadunidenses y mexicanos de la Comisión Internacional de Límites y Aguas determinó que aproximadamente el 80% de la línea de boyas flotantes se encuentra en territorio mexicano, mientras que el restante 20% se halla en suelo estadunidense.
La estructura ha sido criticada por desviar a los migrantes a partes más profundas del río, aumentando el riesgo de ahogamiento.