Un reconocido profesor de física de la Universidad de Harvard concluyó las investigaciones que realizaba en las profundidades del Océano Pacífico, donde, junto con su equipo, buscaba los restos del primer objeto interestelar confirmado que cayó a la Tierra. El investigador había comentado, con anterioridad, que se trataba de un objeto que, según su hipótesis, podría ser una forma de tecnología extraterrestre.

Avi Leob, el famoso profesor de Harvard que se ha vuelto famoso por hablar sobre la existencia de vida extraterrestre, afirmó, en 2017, que el extraño objeto interestelar “Oumuamua” podría ser en realidad un objeto extraterrestre que pasó por la Tierra. Luego de años de investigación, su equipo concluyó, este martes, su expedición de 1.5 millones de dólares, la cual fue llamada «Proyecto Galileo», y que consiguió recolectar 35 miligramos del supuesto material extraterrestre.

Avi Leob, el famoso profesor de Harvard que se ha vuelto famoso por hablar sobre la existencia de vida extraterrestre. Foto: especial.

Buscaron restos de un meteorito que cayó en la Tierra en 2014

Durante la investigación, el académico consiguió recuperar 50 esférulas, pequeñas esferas de material de apenas unos milímetros de diámetro que no corresponden a las característicamente de los meteoritos cuando entran y se queman en la atmósfera de la Tierra. El equipo recolectó las esférulas arrastrando un gran trineo magnético por el fondo del océano frente a la costa de Papa Nueva Guinea, donde supuestamente aterrizó el objeto interestelar.

“Como gotas fundidas de una bola de fuego, llevan información sobre la composición elemental e isotópica del primer meteorito interestelar conocido”, escribió Leob el martes en su blog Medium al hablar sobre el proyecto. De igual manera, explicó que él y su equipo se enfocaron en buscar los restos de CNEOS 2014-01-08, un meteorito que cayó a la Tierra en 2014 y fue recogido por sensores del gobierno de los Estados Unidos y registrado por la NASA.

Durante la investigación, el académico consiguió recuperar 50 esférulas. Foto: especial.

¿Es un objeto extraterrestre?

Tras sus descubrimientos, Leob concluyó que la velocidad de impacto del objeto y su ángulo de entrada inusual sugirieron que podría ser de un sistema solar fuera del nuestro. También aseveró que el objeto no se desmoronó hasta que alcanzó la atmósfera inferior de la Tierra, lo que sugiere que estaba hecho de algo sustancialmente más fuerte que la mayoría de los que se hayan registrado.

Leob sugirió que había un 99.999% de posibilidades de que el objeto fuera interestelar. Según la hipótesis del investigador, sus orígenes interestelares abren la posibilidad de que sea una pieza de tecnología extraterrestre, algo que no podría determinarse a menos que se recolectaran y estudiaran todos los restos.

Las esferas no provienen de ningún material conocido en la Tierra, ni de los meteoritos, por lo que se sugiere que fueron creadas artificialmente. Foto: especial.

“Dada la alta velocidad y la fuerza anómala del material, su origen debe haber sido un entorno natural diferente del sistema solar, o una civilización tecnológica extraterrestre”, escribió Leob en su sitio web. Finalmente, Leob escribió que el conocimiento de la expedición ayudaría a futuros viajes a buscar con aún más precisión y, con suerte, encontrar artefactos aún mejores