Agencias
El técnico de los Galos habló previo a la gran semifinal ante el apodado ‘Caballo Negro’ Doha. Marruecos es inquebrantable. Ya pasaron cinco partidos y nadie les ha hecho daño en la Copa del Mundo, el único tanto en contra que registran es un autogol contra Canadá en fase de grupos.
Esa es la fortaleza de los marroquíes. Didier Deschamps tiene que encontrar la respuesta a la encrucijada africana, abrir el cerrojo de los Leones del Atlas es primordial para conseguir su pase a la final:
“Espero que encontremos la solución, la verdad es que sí son fuertes en la defensa, nadie ha podido encontrar la solución, tenemos que descifrar cómo”, dijo Didier.
Marruecos tiene una defensa de concreto, pero enfrente sus delanteros son letales, Francia tiene dos trabajos qué hacer:
“Son muy buenos en defensa, lo sabemos, pero no hubieran llegado a las semifinales siendo solo defensivos, también tienen buena ofensiva, nosotros tenemos que estar atentos”, indicó.
Deschamps se ha dedicado a estudiar a los marroquíes: “He notado que son organizados, mantienen las posesiones y tienen buen ataque cuando tienen la pelota, tenemos que ser efectivos, esa es la clave”, comentó.
La tribuna es otro adversario que tiene el equipo galo, Marruecos es local en Doha: “Su porra hace mucho ruido, pero eso no hace que anotes goles, es parte del juego, nosotros estamos preparando el partido sin pensar tanto en la atmósfera, sabemos que la podemos tener en contra”, dijo.
Los galos tienen que “tener el balón y crear peligro, Marruecos juega al contragolpe, ya veremos, tenemos que estar preparados para todo”.
Les Bleus son el actual campeón, pero Didier no quiere comparar Mundiales: “No me gusta eso, son torneos distintos, estamos en semifinales, no hemos hecho un torneo perfecto, pero hemos hecho muchas cosas bien”, cerró.