El Gobierno de Ucrania afirmó que Rusia aseguró que seguirá con su ataque hasta que se cumplan sus demandas y que eso significa la rendición, algo que “no es aceptable”.
“La narrativa amplia que me ha transmitido es que (Rusia) seguirá su agresión hasta que Ucrania cumpla sus demandas. Y esa demanda es la rendición, y eso no es aceptable”, dijo el ministro de Exteriores, Dmitro Kuleba, tras un breve encuentro con su homólogo ruso Serguéi Lávrov en la ciudad rusa de Antalya.
“Ellos buscan la rendición de Ucrania. Ucrania es fuerte, está luchando”, dijo el ministro ucraniano, quien aseguró que su país está dispuesto a buscar soluciones pero no a rendirse.
Preguntado sobre si Rusia estaría dispuesto a un cese de las hostilidades, como un compromiso de Ucrania de no entrar en la OTAN y no reconocer la independencia de dos provincias pro rusas en el Este del país, Kuleba afirmó que su sensación tras la reunió es que Moscú “no está en este momento en posición de acordar un alto al fuego”.
El ministro ucraniano aseguró que su interlocutor le expuso que esos temas deben discutirse por otra vía, los encuentros, a un nivel político más bajo, entre los dos países que están teniendo lugar en Bielorrusia.
“Lo último que quiero hoy es matar la esperanza de los civiles que sufren los bombardeos rusos”, dijo el jefe de la diplomacia ucraniana.
Kuleba añadió que detalló a Lávrov la historia de un civil que fue ametrallado por soldados rusos cuando tomo un giro equivocado cuando iba en su coche, “con la esperanza de que respondiera de forma constructiva basándose en simples valores humanos y en el respeto a la vida humana”.
“Son crímenes de guerra y todos los que estén involucrado acabarán respondiendo, eventualmente”, advirtió el ministro.
“Espero sinceramente que el ministro Lávrov continúe esta conversación con sus colegas en el Gobierno y en el Ejército ruso, y que escuchen la súplica de miles de civiles, en cuyo nombre he hablado hoy, y espero que organicen un pasaje seguro para ellos desde las ciudades asediadas, y permitan la llegada de ayuda humanitaria”, dijo.
La reunión en Antalya ha sido la de más alto nivel entre los dos países desde que Rusia invadiera Ucrania hace dos semanas, aunque ha terminado sin avances en la búsqueda de un alto al fuego de 24 horas para aliviar la situación humanitaria, ni en la apertura de corredores para evacuar a civiles de las ciudades asediadas por los rusos.