Agencias
El argentino Santiago Solari, entrenador de las Águilas del América del fútbol mexicano, aseveró este domingo que no se va a rendir nunca hasta que su equipo vuelva a competir para ganar.
Mi posición se trata de superar la adversidad, de no rendirse nunca y yo no me voy a rendir hasta que este equipo vuelva a competir para ganar”, dijo el técnico al final del partido en el que las Águilas cayeron 1-3 ante Pachuca en la sexta jornada del Clausura.
El América tuvo opciones de gol en el primer lapso del duelo, pero no puntería; Pachuca fue más certero y ganó con goles del argentino Nicolás Ibáñez, del colombiano Avilés Hurtado y de Víctor Guzmán, por las Águilas anotó Henry Martín.
Solari reconoció el mal momento de su equipo que ha encajado cuatro derrotas en seis partidos; ante el Atlas, San Luis y Pachuca en el Estadio Azteca y contra el Mazatlán FC como visitante.
“No hemos competido como debíamos en lapsos importantes del partido de hoy, pero tampoco en otros partidos, como fue contra San Luis; no hemos competido para ganar, que es lo que se debe hacer en este club”, aceptó.
El estratega reconoció que la responsabilidad es compartida entre el cuerpo técnico y sus dirigidos.
“Los responsables de esto somos todos en conjunto. A mí me corresponde la parte técnica y a los jugadores en su función de futbolistas”.
El timonel argentino enfatizó la vulnerabilidad que ha presentado la defensa de las Águilas que ha recibido 13 goles en seis partidos.
“Estamos ofreciendo mucha debilidad en defensa, nos hacen muchos goles y es algo que tenemos que resolver rápidamente”.
Santiago Solari justificó los abucheos con los que él y su cuadro fueron despedidos por la afición del América.
“La afición tiene el derecho de expresarse y en este momento lo extraño sería que nos aplaudieran porque no lo estamos haciendo bien; así que ellos pueden gritar o abuchear, es lo mismo mientras no mejoremos”.
Con la derrota el América descendió al lugar 16 entre 18 equipos en el certamen, tiene cuatro puntos producto de un triunfo, un empate y cuatro derrotas.