Agencias
La Unión Europea ha logrado su objetivo de administrar antes del final del verano la pauta completa de la vacuna contra COVID-19 al 70 por ciento de su población adulta, pero Bruselas advierte que las campañas deben continuar para “ganarle la carrera a las variantes” y atajar la brecha de vacunación entre países.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, celebró este martes el “gran logro” que supone haber inmunizado a 256 millones de europeos, pero alertó que “la pandemia no se ha acabado” e instó a que “todo el que pueda vacunarse lo haga”.
Y es que la cota de 70 por ciento esconde importantes disparidades en la vacunación, con los países del Este especialmente rezagados, en un momento de subida de los casos de COVID-19 en el continente que la Organización Mundial de la Salud (OMS) atribuye sobre todo a la variante Delta, muy contagiosa.
“Nuestros esfuerzos para aumentar la vacunación en toda la Unión Europea continuarán sin cesar. Seguiremos apoyando en particular a los Estados miembros que tienen dificultades. Tenemos que cerrar la brecha de inmunidad y la puerta a nuevas variantes y, para hacerlo, las vacunas deben ganar la carrera a las variantes”, dijo la comisaria de Salud, Stella Kyriakides, en un comunicado.
Vacunación desigual en la Unión Europea
La Comisión Europea, encargada de centralizar las compras de vacunas para los Estados, se había fijado a principios de año la meta de vacunar durante el verano al 70 por ciento de la población adulta, un objetivo que entonces parecía ambicioso.
Tras un inicio lento de la campaña por la escasez de vacunas, los retrasos en las entregas y la suspensión temporal de la administración de AstraZeneca en algunos países, Bruselas logró ya en julio entregar las dosis necesarias para ello a los Estados, que también han ido acelerando y perfeccionando sus estrategias de vacunación.
Sin embargo, las tasas varían mucho entre los Veintisiete, con Irlanda a la cabeza con un 85.5 por ciento de su población adulta totalmente vacunada, seguida de Dinamarca (83.5 por ciento) y Portugal (82.4 por ciento); mientras que a la cola se sitúan Bulgaria (20 ), Rumanía (31.9 por ciento) y Letonia (45.5 por ciento), según datos del Centro de Control de Prevención y Enfermedades (ECDC).
España, de los más avanzados, ha administrado ya la pauta completa de la vacuna al 76.7 por ciento de los adultos y 87.6 por ciento tiene al menos una dosis.
¿Hacia una tercera dosis?
A pesar de que muchos Estados aún no han alcanzado la marca de 70 por ciento, la Unión Europea ya se plantea si debería administrarse una dosis de refuerzo, aunque la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y el ECDC aún no se han pronunciado sobre si sería necesaria y para qué grupos.
De ser el caso, el comisario europeo de Mercado Único, Thierry Breton, asegura que no habría escasez de vacunas puesto que la UE, líder mundial de producción, ha aumentado su capacidad y ahora mismo fabrica “300 millones de dosis al mes”.
En el segundo semestre del año, la Comisión Europea entregará 950 millones de dosis a los Estados miembros, explicó en una entrevista con la televisión pública francesa la semana pasada.
Sin embargo, las tasas varían mucho entre los Veintisiete, con Irlanda a la cabeza con un 85.5 por ciento de su población adulta totalmente vacunada, seguida de Dinamarca (83.5 por ciento) y Portugal (82.4 por ciento); mientras que a la cola se sitúan Bulgaria (20 ), Rumanía (31.9 por ciento) y Letonia (45.5 por ciento), según datos del Centro de Control de Prevención y Enfermedades (ECDC).
España, de los más avanzados, ha administrado ya la pauta completa de la vacuna al 76.7 por ciento de los adultos y 87.6 por ciento tiene al menos una dosis.
¿Hacia una tercera dosis?
A pesar de que muchos Estados aún no han alcanzado la marca de 70 por ciento, la Unión Europea ya se plantea si debería administrarse una dosis de refuerzo, aunque la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y el ECDC aún no se han pronunciado sobre si sería necesaria y para qué grupos.
De ser el caso, el comisario europeo de Mercado Único, Thierry Breton, asegura que no habría escasez de vacunas puesto que la UE, líder mundial de producción, ha aumentado su capacidad y ahora mismo fabrica “300 millones de dosis al mes”.
En el segundo semestre del año, la Comisión Europea entregará 950 millones de dosis a los Estados miembros, explicó en una entrevista con la televisión pública francesa la semana pasada.
La UE ha exportado la mitad de las vacunas producidas en Europa y destinará hasta finales de año al menos 200 millones de las dosis que ha comprado a países de bajos recursos, indicó.
“Necesitamos que el resto del mundo también vacune. Europa continuará apoyando a sus socios en este esfuerzo”, dijo Von der Leyen.