Agencias

La Organización Mundial de la Salud (OMS), que durante semanas ha instado a los países más desarrollados a que donen sus excedentes de vacuna contra el COVID-19 a naciones pobres, pidió hoy también que esas donaciones se coordinen bien a través de plataformas globales como COVAX, para evitar repartos desiguales.

No ayuda que los países por cuenta propia provean directamente a otros, el equilibrio se ve dificultado si no es a través de la plataforma COVAX”, aseguró en una rueda de prensa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

Si se utiliza esa plataforma, creada por la OMS y otras organizaciones internacionales para distribuir las vacunas globalmente, “sabemos dónde van y podemos equilibrar mejor”, señaló, aunque también dijo comprender que algunos gobiernos prefieran donar a países vecinos o con especiales lazos.

Tedros subrayó que en una reciente conversación telefónica con el presidente francés, Emmanuel Macron, ambos coincidieron en que los problemas de producción de vacunas que hay actualmente son uno de los principales obstáculos para lograr una inmunización mundial, por lo que hay que tomar medidas para reducirlos.

El máximo responsable de la OMS recalcó que mientras en Europa muchos países se han fijado el objetivo de lograr vacunar al 70 por ciento de su población antes de este verano, a nivel global la meta para 2021 es más modesta, de en torno al 27 por ciento, pero resolviendo los problemas de producción “podría aumentar”.