Agencias
El presidente estadounidense Donald Trump insistió el martes que no desistirá de su lucha para revertir los resultados de las elecciones, pero en el gobierno federal ya iniciaron los preparativos para apoyar al gobierno entrante del presidente electo Joe Biden.
Horas después de que la Administración General de Servicios (GSA por sus siglas en inglés) determinó el lunes por la tarde la victoria de Biden en los comicios del 3 de noviembre, funcionarios federales abrieron las puertas de las agencias a cientos de asesores de la transición en preparación para la toma de posesión prevista para el 20 de enero. Y el martes, Trump autorizó que Biden recibiera el informe presidencial diario, un reporte sumamente confidencial que es elaborado por la comunidad de inteligencia del país para los funcionarios de más alto rango del gobierno.
Un funcionario del gobierno dijo que aún seguían trabajando en torno a la logística sobre cuándo y dónde recibirá Biden su primer informe.
En una entrevista con el programa “Nightly News” de la cadena NBC, Biden dijo que también estaba buscando reunirse con el grupo de trabajo de la Casa Blanca para la respuesta al coronavirus y para las labores de distribución de la vacuna.
Para el martes por la tarde, el equipo de transición de Biden había estado en contacto con todas las agencias federales sobre los planes para el cambio de gobierno, de acuerdo con un funcionario de transición.
Sin embargo, Trump, que no ha aceptado formalmente su derrota y quizás nunca lo haga, siguió expresando sus dudas sobre la votación, a pesar de que una evaluación de su propio gobierno indicó que los comicios se llevaron a cabo sin ningún fraude, conducta indebida o injerencia.