En las últimas horas se ha alertado por los vientos de Santa Ana que podrían avivar los incendios en Los Ángeles y el resto de California.
En el séptimo día de la catástrofe de California, se comenzaron a vislumbrar los primeros atisbos de vida normal a pesar de que más de 90 mil personas siguen evacuando.
Sin embargo, con la previsión de que los fuertes vientos de Santa Ana regresen el martes, las autoridades aseguraron que se preparan para nuevos desafíos.
«El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, siglas en inglés) prevé vientos huracanados, por lo que estamos haciendo preparativos urgentes», alertó la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass.
Vientos de hasta 110 kilómetros por hora suponen una “situación especialmente peligrosa” desde primera hora del martes, dijo la meteoróloga del NWS Rose Schoenfeld.