Al menos 48 personas murieron este lunes en la Franja de Gaza por ataques israelíes, según un recuento elaborado en las morgues de los hospitales por informadores locales y difundido en una plataforma conjunta.

Más de la mitad de las víctimas, 27, fallecieron en el norte del enclave, donde el Ejército israelí mantiene una ofensiva en la capital gazatí.

En la ciudad de Gaza, las fuerzas israelíes bombardearon este lunes una torre, la cuarta destruida en los últimos días, situada junto a un campamento de desplazados.

El ataque afectó a más de un centenar de tiendas de campaña que rodeaban el edificio, según testigos citados por EFE en el enclave.

El Ejército justificó la operación al asegurar que el inmueble era utilizado por el movimiento islamista Hamás.

Otros 20 gazatíes perdieron la vida en el sur, en Jan Yunis, donde el sábado pasado Israel anunció la creación de una nueva «zona humanitaria».

Esa área ya había sido ampliada el año pasado desde la franja costera de Mawasi —en el suroeste— hasta Jan Yunis. Allí se han concentrado miles de desplazados de distintos puntos del enclave, en un improvisado campamento de tiendas, sin electricidad ni agua potable.