El expresidente de Estados Unidos y candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, accedió a dar su testimonio al FBI sobre el intento de asesinato que sufrió durante un mitin de campaña.
Se trata de un procedimiento habitual en las víctimas de crímenes investigados por el FBI, según explicó la agencia este lunes en una llamada con periodistas.
La idea es «obtener su perspectiva sobre lo que observó, al igual que cualquier otro testigo del crimen», dijo en la llamada Kevin Rojek, de la oficina del FBI en Pittsburgh (Pensilvania).
La investigación del FBI dos semanas después del atentado sigue tratando de esclarecer los motivos del tirador, Thomas Matthew Crooks, que fue abatido.
Crooks, de 20 años, era una persona «muy inteligente», solitaria, y con un creciente interés por las armas, según el FBI.
La agencia también indicó que su círculo social era muy limitado y que se esforzó en mantener en secreto sus actividades.
Sobre el historial de búsquedas ya conocido, que además de Trump incluía al presidente estadounidense, Joe Biden, o las fechas de la Convención Nacional Demócrata de agosto en Chicago, el FBI dio hoy más detalles.
Crooks había investigado sobre el intento de asesinato reciente al primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, y la distancia desde la que disparó Lee Harvey Oswald para matar al expresidente John Fitzgerald Kennedy en 1963.
Trump fue herido de bala en una oreja mientras participaba en un mitin en Butler (Pensilvania) el pasado 13 de julio. El tirador había trepado a un tejado a unos 140 metros del expresidente, aunque fuera del perímetro de seguridad del Servicio Secreto.