La futura presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se reunió con los padres de los 43 estudiantes desaparecidos de la escuela Normal Rural de Ayotzinapa en 2014. Este encuentro representa un nuevo capítulo en la búsqueda de justicia para estas familias, que han vivido en la incertidumbre y la frustración durante años.

A pesar de las promesas hechas por los presidentes anteriores, los padres de los desaparecidos continúan sin respuestas sobre el paradero de sus hijos. La reunión con Sheinbaum es un rayo de esperanza para estas familias, que han sido engañadas y traicionadas por las administraciones anteriores.

La tensión con el gobierno actual ha aumentado en los últimos meses, especialmente debido a la negativa de las Fuerzas Armadas de entregar documentos solicitados por los abogados de los familiares. Las recientes declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador también han contribuido a las tensiones, ya que ha arremetido contra los representantes de los familiares y exculpado al ejército de cualquier responsabilidad en este caso.

A pesar de los esfuerzos de la Fiscalía General de la República, la Comisión de la Verdad y los expertos de la CIDH, muchos detalles sobre la desaparición de los estudiantes aún son desconocidos. Se cree que fueron asesinados por un cártel de drogas en colaboración con fuerzas de seguridad y autoridades locales, estatales y federales.

A casi diez años del ataque en Iguala, Guerrero, todavía no hay sentenciados por estas desapariciones. El ex procurador general Jesús Murillo Karam y 16 militares están implicados en el caso, pero la mayoría han sido puestos en libertad. La lucha por la justicia para los 43 desaparecidos de Ayotzinapa continúa, y la reunión de Claudia Sheinbaum con los padres es un paso en la dirección correcta.