A 100 días para que concluya la gestión de Andrés Manuel López Obrador, la virtual presidenta, Claudia Sheinbaum, presentó su visión de Prosperidad Compartida, donde propone reducir el déficit fiscal en 2025 a entre 3.3% y 3.5% del PIB, también se compromete a que no habrá gasolinazos ni aumento a la luz y gas doméstico mayores a la inflación.
Su proyecto, en materia económica y de desarrollo, tiene como eje principal la «prosperidad compartida». Menciona que no se condonarán impuestos a grandes contribuyentes y continuará el combate a la evasión; mantendrán un equilibrio razonable entre deuda y Producto Interno Bruto (PIB); continuará con finanzas públicas sanas, la denominada Austeridad Republicana.
En su visión de prosperidad compartida, señala que México tiene un gran potencial de desarrollo para los próximos años, por la estabilidad económica y social, y por las oportunidades de la relocalización, pero el desarrollo debe brindar bienestar y sustentabilidad; la relocalización debe generar cadenas productivas, transferencia tecnológica e innovación, vinculando la investigación científica con sectores estratégicos; la planeación territorial para el desarrollo, con infraestructura pública, potencia la inversión privada y el desarrollo; indica que México tiene un sector bancario sano, pero se necesita avanzar en las facilidades de acceso al crédito para micro y medianas empresas.
Como Plan Nacional de Seguridad y Justicia, menciona la consolidación de la Guardia Nacional, el fortalecimiento de la inteligencia y la investigación, coordinación con Policías y Fiscalías estatales, Modelo nacional de defensorías públicas y coordinación con Fiscalías.
En cuanto a la energía, el Estado mantendrá su participación en la generación eléctrica del 54%, pero se consideran inversiones en 2025 de 55,412 millones de pesos en transmisión, con 44 proyectos de refuerzo de las líneas, así como 41 proyectos en las redes generales de distribución. En el 46% de generación privada se establecerán reglas claras que generen certeza y tengan como fin mayor el bienestar y el interés de la nación. Se impulsará la transición energética.
En el plan hídrico, considera la tecnificación del riego agrícola, obras estratégicas y nuevas fuentes, revisión consensuada de concesiones, políticas de reuso de agua, cambios en la Ley de Aguas Nacionales, programa de limpieza de ríos en las cuencas más contaminadas,
Establece una agencia de transformación digital y de telecomunicaciones que se crea de la Ley General de Mejora Regulatoria a Ley General de Simplificación y Digitalización, con 50% menos trámites, la mitad del tiempo y de los requisitos, y un 80% de los procesos digitalizados.
Sheinbaum destaca en el Plan nacional de Infraestructura los proyectos legados, como son el Tren Maya o el Tren Interoceánico, el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles y el de Tulum, así como la Refinería Dos Bocas. En carreteras, propone modernizar al menos 3 mil kilómetros de caminos rurales y ampliar el programa de caminos artesanales. Terminar, ampliar y hacer nuevas carreteras, como la San Luis-Piedras Negras, que atravesaría Coahuila.