Específicamente, refiere a la aprobación de la ley HB1105, sancionada ya por el gobernador de Georgia, Brian Kemp, y entrará en vigor el siguiente 1 de julio.
Con esta ley, las autoridades de Georgia exigirán a las prisiones revisar el estado migratorio de sus reos, para que se entregue a los prisioneros indocumentados al Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).
La Cancillería de México considera que esta ley podría detonar graves consecuencias como la separación de familias, prácticas discriminatorias y de perfilamiento racial, así como la potencial disminución de las denuncias en las agencias de orden público por el temor a repercusiones migratorias.
«Por medio de nuestra representación consular en Atlanta se reforzarán las medidas de asistencia y protección consular, para garantizar una respuesta rápida y efectiva a cualquier violación de derechos que puedan enfrentar nuestros connacionales como resultado de la implementación de esta nueva ley», aseveró al SRE.
Asimismo, destacó que el 11% de la población total de Georgia son hispanos y contribuyen a sectores importantes como la agricultura, silvicultura, construcción y servicios.