El número de muertos a causa de los sismos que sacudieron la costa occidental de Japón la semana pasada ha aumentado a 126, según informaron las autoridades el sábado.
Entre las víctimas se encuentra un niño de 5 años que falleció el viernes, tras empeorar su estado de salud luego de sufrir heridas por el sismo.
La prefectura de Ishikawa, la región más afectada, ha reportado el mayor número de víctimas.
Las autoridades advierten que las carreteras, ya agrietadas por los temblores y réplicas continuas, podrían colapsar por completo.
El peligro aumenta con la llegada de lluvias, pronosticadas para la noche y el domingo. Esto bloquearía el reparto de ayuda y dificultaría las labores de rescate.Más de 500 heridos y 27 en estado grave:
Además de los fallecidos, más de 500 personas resultaron heridas a raíz de los sismos. Entre ellos, al menos 27 se encuentran en estado grave, requiriendo atención médica urgente.
Aunque el número de personas desaparecidas ha fluctuado en los últimos días, se estima que más de 200 personas aún están desaparecidas.
Las viviendas han sufrido graves daños, con techos desplomados y carreteras deformadas.
Un incendio en la ciudad de Wajima dejó un vecindario reducido a cenizas.
Japón ha recibido condolencias y promesas de ayuda por parte del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y otros aliados. Incluso el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, envió un mensaje de condolencias al primer ministro japonés.
Este gesto inusual podría ser un intento de mejorar las relaciones y debilitar la cooperación entre Japón, Estados Unidos y Corea del Sur.
Aunque el suministro eléctrico en la costa japonesa se está restableciendo gradualmente, aún persiste la escasez de agua.
Los sistemas de emergencia también han sufrido daños debido a los sismos.
Miles de soldados están llevando agua, alimentos y medicinas por tierra y aire para las más de 30,000 personas evacuadas que se encuentran alojadas en auditorios, escuelas y otras instalaciones.