Al menos 13 personas murieron y 178 resultaron heridos por la gran explosión que la noche del domingo al lunes sacudió un depósito de combustible en la capital de Guinea-Conakri, confirmó hoy el Gobierno de ese país de África occidental.

«Tras el incendio en el depósito principal de hidrocarburos de la Sociedad Guineana de Petróleo en Kaloum la noche del 17 al 18 de diciembre de 2023, el informe provisional del mediodía muestra 13 cadáveres depositados en estructuras sanitarias y 178 heridos de nacionalidades guineana y extranjeras», afirmó el Ejecutivo en un comunicado.

«El tratamiento de las víctimas permitió a 89 heridos regresar con sus familias», precisó el Gobierno, al enviar su «más sentido pésame a las familias afligidas y al pueblo de Guinea».

Las autoridades aseguraron que»el incendio ha sido contenido y se están realizando esfuerzos para extinguirlo totalmente» y, como medida de precaución, recomendó el «uso de mascarilla en la zona».

Para gestionar el desastre, el Gobierno adoptó varias medidas, como el establecimiento de una unidad gubernamental de crisis, la creación de un punto de evacuación para la población local y la activación de un plan de emergencia sanitaria para la atención gratuita de heridos y personas afectadas.

El presidente del país, coronel Mamadi Doumbouya, afirmó en su cuenta de la red social X (antes Twitter) que se han abierto «investigaciones» para determinar «las causas exactas del incendio y el costo humano y material de esta tragedia».

La explosión sucedió en la comuna de Kaloum, en el centro de la ciudad de Conakri y cerca del puerto, donde vídeos publicados por medios locales mostraron enormes llamas y una gran humareda negra que cubría el cielo.

Al parecer, en esos depósitos se almacena el combustible antes de ser distribuido al resto del país.

Frente a esta situación, el Gobierno guineano instó a los habitantes de los alrededores a que se alejaran para protegerse y permitir operar a los servicios de emergencia.

Las autoridades también recomendaron a los trabajadores que permanezcan en su domicilios y ordenaron el cierre de las escuelas públicas y privadas y de las «estaciones de servicio»,excepto «para los servicios de emergencia».

«Nos despertó un ruido ensordecedor, ya estábamos dormidos (…) Los vidrios de nuestra casa y la de nuestros vecinos se rompieron. Hemos conseguido alejarnos del lugar»,declaró a un diario guineano uno de los vecinos afectados, sin revelar su nombre.

«Pensé que era un terremoto de lo fuerte que fue la detonación»,añadió otra residente, también anónima.

Kaloum acoge muchas embajadas y bancos, así como la sede del Gobierno guineano y la Asamblea Nacional (Parlamento unicameral) del país, gobernado por una junta militar desde el golpe de Estado de septiembre de 2021.