Aunque por años Victoria Ruffo se negó a hablar de la relación tormentosa que vivió con Eugenio Derbez, distintos medios han revivido una entrevista en la que la actriz reconoció que tuve que ir a terapia para superar la historia que vivió con el actor, pues cuando rompieron pasó muy poco tiempo para que el comediante reanudara su vida amorosa junto a Sara Bustani, lo que generó muchas inseguridades en la actriz, pues se sentí poco atractiva y con toda la responsabilidad de criar a su hijo José Eduardo.
La semana pasada se dio a conocer la versión de que la actriz y su esposo Omar Fayad atravesaban una crisis matrimonial que desencandería en divorcio, sin embargo, fue la propia actriz la que se encargó de desmentir la noticia en «La mesa caliente», un programa de Telemundo, en el que sus conductoras aprovecharon para preguntar a Ruffo algunas otras cuestiones relacionadas con su vida personal.
Fue entonces que, determinante, Vicky aseguró que no se arrepentía de haber conocido a Eugenio Derbez y de la historia de amor que los unió por más de un lustro, pues se conocieron a finales de los ochenta y se separaron en 1996, cuando José Eduardo, el hijo que tiene en común tenía sólo cuatro años, pues la actriz aseguró que todo lo que aconteció la ayudó a criar a su primogénito, a quien ve como un joven contento con la vida que no guarda rencores a nadie.
«Actué perfectamente bien, siempre he pensado en lo principal que es mi hijo José Eduardo, en no hacerle daño, en crecer un ser humano bonito, honesto, alegre, contento con la vida, sin que tuviera ningún problema de nada ni en contra de nadie, entonces no me arrepiento ni de haber conocido a Eugenio, ni de haber estado con Eugenio, ni de tener a José Eduardo, de nada, no me arrepiento», precisó.
Sin embargo, en una entrevista que está siendo difundida por diferentes sitios, que Ruffo concedió hace unos años, confiesa que la separación del padre de su primer hijo fue muy complicada, ya que tuvo que ir a terapia para seguir adelante con su vida, pues en principio no quería ir a ningún lado y tampoco quería que nadie la viera, pues cuando terminaron su relación, se dio a conocer la supuesta noticia de que Derbez había preparado una boda falsa para cumplir cuando se enteró que la actriz estaba embarazada.
Aunado a esto, al poco tiempo de que se separaron, Eugenio comenzó una relación con la diseñadora Sara Bustani, con la que duró casi seis años, lo que provocó una crisis de seguridad en la actriz de «Simplemente María».
«Yo no quería salir, sentía que si salía a la calle era como señalada: ‘-Mírala la dejaron por otra, mírala qué fea, está gorda, por eso la dejaron, mira qué vieja’. De repente te ves tu sola, sin trabajo, gorda, fea y con un niño y volteas a ver al señor y con novia, trabajo, delgado, guapo y sin niño», indicó en aquel momento.
Esto llevó a la actriz a buscar ayuda profesional, pues dijo que acudió a terapia por siete meses, convirtiéndose en una de las soluciones para continuar con su vida, pues entendió que la relación había acabado por responsabilidad de ambos y no sólo porque ella lo hubiera provocado como tanto pensó.
«Estuve como siete meses con una terapeuta; tengo una frase muy clara que me ayudó mucho, que fue ‘el problema es de dos, el 50 por ciento de uno, y el 50 por ciento del otro», o sea, no es tu culpa totalmente, ni la culpa del otro, y yo me echaba la culpa totalmente».
Al poco, Vicky conoció al político Omar Fayad en una fiesta donde tenían amigos en común y sólo bastó unos meses para que formalizaran su relación que llegó al altar en 2001.