A pesar de sus esfuerzos por continuar con el concierto, la salud de Anahí se vio comprometida, evidenciando síntomas de malestar a lo largo de la presentación. La cantante, afectada por la afonía, anunció que necesitaba dirigirse al hospital.
El final del evento no transcurrió de la mejor manera, ya que Anahí fue captada abandonando el Allianz Parque de Sao Paulo en una ambulancia. Acompañada por su esposo, Manuel Velasco, la artista recibió atención paramédica en el lugar.
La preocupación entre los asistentes creció al observar la incomodidad y las expresiones de dolor de la intérprete durante el concierto. Dulce María, otra integrante de RBD, aseguró que permanecería en el escenario tanto como fuera posible, «hasta que el cuerpo aguante». Sin embargo, la salud de Anahí generó incertidumbre sobre la continuidad del tour y la participación de la artista en futuros eventos.