Rusia ha introducido medidas antiterroristas en la capital y en la región de Moscú, después de que el jefe del grupo de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin, se declarara en rebeldía con el mando militar del Ministerio ruso de Defensa para acabar con el «caos» que supone la guerra en Ucrania.
«En relación con la información que llega, en Moscú se están tomando medidas antiterroristas destinadas a fortalecer las medidas de seguridad», señaló el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, en su canal de Telegram.
«En la región de Moscú, se han fortalecido las medidas de seguridad, la situación está controlada por las fuerzas del orden y el Servicio Federal de Seguridad», indicó por su parte el gobernador de la provincia, Andréi Vorobiov.