Refugiados ucranianos que huyen de la invasión rusa en su país y que están llegando a Tijuana para solicitar asilo en Estados Unidos, fueron ubicados este fin de semana en un albergue temporal.
Las autoridades locales montaron el albergue en una unidad deportiva, ubicada a menos de un kilómetro del puerto fronterizo de San Ysidro.
Todas las personas de Ucrania que llegan al aeropuerto de Tijuana son recibidas por un grupo de voluntarios y autoridades de migración mexicanas, quienes los llevan al albergue en donde tienen acceso a alimentación, un espacio para pernoctar y aguardar hasta que sean llamados para ingresar a Estados Unidos.
El sábado llegó al lugar el primer grupo de refugiados, unas 100 personas, y esté domingo se esperaba la misma cantidad.
Los ucranianos al ingresar al albergue muestran un código que automáticamente los registra en una plataforma creada por los voluntarios, la cual les da el número de turno en el que les tocará salir al puerto fronterizo.
Adriana Espinoza Nolasco, subsecretaria de Asuntos Migratorios de Baja California, contó a Efe que la instalación de este albergue se debe a incremento constante en las últimas semanas de personas de Ucrania en la ciudad, las cuales se estaban concentrando en una caseta de transporte público a un costado del puerto de San Ysidro, además de brindarles seguridad sobre todo a las familias.
Las personas vienen directamente al albergue, aquí se les comienza a asignar el número (para ingresar a EE.UU.) y todo esto es el trabajo de los voluntarios; el albergue será atemporal y tendrá lo necesario para que las personas que van llegando puedan terminar su trámite para llegar a Estados Unidos”, dijo.
Nassar, uno de los refugiados que llegó en el primer grupo al albergue, viaja con sus dos hermanos menores y su objetivo es llegar a California, luego de que ya no pudieron estar más en su natal Kiev.
Los tres realizaron un viaje largo que comprendió estancias en países como Alemania, Polonia, España y de ahí a Ciudad de México, para posteriormente llegar a Tijuana.
Agregó que aunque no ha podido conocer mucho de México, porque se la ha pasado viajando, se siente “muy agradecido por todo el trato que nos están dando y mucho más seguro de ver cómo nos están recibiendo y de estar en este albergue junto con mis hermanos”.