Agencias

Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, aseguró que sus adversarios esperaban que manifestantes quemaran el Palacio Nacional, durante las protestas del 8 de marzo.

Tras señalar durante su conferencia matutina de este miércoles que «no hubo desgracias que lamentar» en las marchas, expuso lo siguiente:

«Estaban, eso sí, nuestros adversarios esperando que se incendiaria el Palacio o la Catedral, pero pues se tomaron las medidas necesarias».

Acusó que sus opositores que más esperaban la destrucción son aquellos que «tiran la piedra y esconden la mano».

«No les gustó que se pusiera la valla, pero imagínense si no pusiéramos la valla», afirmó AMLO.

Declaró, también, que «un grupo pequeño, minoritario, no la mayoría de las mujeres se fue sobre la valla a quererla tirar con martillos sopletes y no pudieron, porque es una valla alta y fuerte, pero eso evitó el choque y desgracias».

Finalmente, felicitó a las mujeres que participaron por su actitud responsable. «Se optó por la paz, no por la violencia».