Agencias

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, reconoció que Francia tiene una “deuda” con la Polinesia Francesa debido a los cientos de pruebas nucleares que se llevaron a cabo en dicho territorio.

“Asumo y quiero la verdad y la transparencia», afirmó Macron en Papeete ante las autoridades polinesias en el último día de su primera visita al archipiélago.

Durante su discurso, el mandatario inició y concluyó con unas palabras en polinesio, reconociendo que este tema afecta la “confianza” entre Papeete y París, además aseguró que las víctimas de esta pruebas (algunas enfermas de cáncer), debería recibir una indemnización mejor.

“La nación tiene una deuda con la Polinesia Francesa. Esta deuda es por haber acogido estos ensayos, sobre todo entre 1966 y 1974, y no podemos decir de ninguna manera que fueran limpios», declaró, en medio de aplausos.

Francia trasladó en 1966 su campo de tiro del Sahara a la Polinesia Francesa, en los atolones de Mururoa y Fangataufa, donde durante 30 años se llevaron a cabo pruebas nucleares.