Agencias

Phoenix nunca ha ganado el trofeo, Milwaukee no triunfa desde hace 50 años Chris Paul subió las escaleras y se sentó frente al logotipo de las Finales de la NBA, un ascenso que le tomó 16 años completar.

Los Suns de Phoenix y los Bucks de Milwukwee están habituados a las largas esperas. Llegaron a la NBA al mismo tiempo en 1968 y entre los dos han logrado ganar un campeonato. Suman un viaje a las finales desde mediados de la década de 1970.

Ahora, ambos están en el mismo lugar, un par de desconocidos participantes para terminar una inusual campaña.

«Al llegar aquí, ver al señor Larry en los posters», dijo el pívot de los Suns DeAndre Ayton, refiriéndose al Trofeo Larry O’Brien, «me da escalofríos». Imaginen la sensación si está en el primer equipo de los Suns que gana un campeonato de la NBA.

El primer juego de la serie está programado para el martes y se llevará a cabo en Phoenix, que no ha recibido ningún encuentro de las Finales desde que Michael Jordan y los Bulls de Chicago completaron su tricampeonato en 1993.

La única otra oportunidad que han tenido los Suns fue en 1976, cuando perdieron ante Boston. El estatus de Giannis Antetokounmpo está en duda. El coach de los Bucks, Mike Budenholzer, reconoció que no tiene ninguna actualización sobre la rodilla lesionada de la superestrella. «Sin él, lo tenemos que hacer en comité», dijo el base de los Bucks Khris Middleton.

Es un escenario totalmente nuevo para Paul, de 36 años, que reconoció una de las diferencias. Los equipos locales normalmente practican en sus instalaciones, pero el entrenamiento en la víspera de las Finales de la NBA es en el estadio.

«Aún es baloncesto», comentó el base. «Creo que todos estamos enfocados en la meta». Milwaukee ganó el título en 1971, fue hace tanto tiempo que Kareem Abdul-Jabbar aún era conocido como Lew Alcindor, cuando él y Oscar Robertson eran quizás la mejor dupla de la liga. Los Bucks eligieron a Alcindor primero en 1969 tras ganar un volado con los Suns.

Los Bucks regresaron a las Finales en 1974, pero no habían vuelto desde entonces. Se habían acercado en los últimos años.

Milwaukee terminó con la mejor foja de la NBA tanto en la temporada de 2018-19 como en la de 2019-20 y se quedó a dos partidos de las Finales de la NBA en esa primera campaña. Están de regreso tras adquirir al base Jrue Holiday antes del inicio de esta temporada.

«Conseguir estos cuatro triunfos va a ser difícil, pero es emocionante», dijo Holiday. Los Suns no iban hacia ninguna parte, ni siquiera habían alcanzado las finales desde 2010. Hace dos temporadas terminaron con foja de 19-63, empatando la segunda peor marca de la liga.

Pero una racha invicta en sus ocho partidos disputados en la burbuja de Walt Disney World en la reanudación de la temporada el verano pasado los envió a esta campaña con un impulso, y llegaron a ella con un nuevo líder cuando adquirieron a Paul de Oklahoma City.

Paul estuvo fuera de acción por los protocolos de salud implementados por el Covid-19 de la liga, y que todos los equipos tuvieron que superar. Varias estrellas también lidiaron con las lesiones y los Bucks esperan que Antetokounmpo pueda regresar.

El dos veces Jugador Más Valioso se perdió los juegos 5 y 6 de la final de la Conferencia Este tras sufrir una hiperextensión de la rodilla izquierda cuando saltó para defender un tiro en el juego 4.

Middleton y Holiday lideraron a los Bucks ante los Hawks en ambos juegos. «Creo que los chicos hicieron un buen trabajo ajustándose sin él en dos de los juegos más importantes de la temporada», señaló Middleton.