Agencias

A casi tres semanas de protestas, la policía de Myanmar lanzó su más fuerte respuesta contra los manifestantes, donde arresto a cientos de personas e hirió de bala a una mujer.

Televisora estatal anunció la deportación de una comisión especial que mandó la Organización de las Naciones Unidas (ONU) por traición al país.

El régimen militar que tomó el poder el 1 de febrero mantiene una difícil situación luego de que miles de ciudadanos salieron a las calles a defender a la líder que mantienen en prisión domiciliaria.

Los militares prometieron llevar a cabo elecciones, no obstante, no dieron fecha por lo que cientos de miles siguen en protesta mientras países de occidente condenan el golpe de estado.

En la última protesta una mujer recibió un balazo luego de que en manifestación subieran los ánimos y la policía comenzara a disparar para dispersar el tumulto.