En las últimas horas, decenas de peruenos se vieron obligados a acampar en plena calle para poder recargar sus respectivos tubos de oxígeno y ayudar en la asistencia de sus seres queridos contagiados con Covid-19.

Perú afronta severos problemas para responder de forma adecuada a la pandemia del coronavirus y presentan una situación similar en las ciudades del Valle de México.

Indican que en la ciudad portuaria de Callao, desde hace algunas noches muchos ciudadanos deben dormir junto a sus tanques mientras esperan el suministro.

Allí, a minutos de la capital, cientos de cilindros verdes están acomodados en una fila, dispuesta por orden de llegada, y llevan inscriptos los nombres de los pacientes para poder identificarlos.

Las familias pueden cargar apenas la mitad de sus tubos (5 metros cúbicos) por 100 soles (alrededor de 27 dólares).

En promedio, dicho sitio realiza unas 120 recargas al día, pero a veces los tanques son tantos que los solicitantes pueden estar dos jornadas aguardando para conseguir un poco de oxígeno.